Criptorquidia por trastornos endocrinos.

Criptorquidia por trastornos endocrinos.  Todos los trastornos endocrinos que producen insuficiencia genital pueden dar lugar a la criptorquidia. Se presentará, pues, en los casos siguientes, ligados, directa o indirectamente, en la mayoría de casos, a la insuficiente secreción androgénica:

     A) Insuficiencia hipofisaria. La hipófisis parece jugar un papel definido en la emigración de los testículos; por eso, casi todas las formas de insuficiencia hipofisaria infantil se suelen acompañar de criptorquidia. Podemos dividir la criptorquidia hipofisaria en dos grandes grupos:

     1. Cuando hay otros síntomas de insuficiencia hipofisaria (enanismo, síndrome adiposogenital, diabetes insípida, caquexia); entonces, el diagnóstico es muy sencillo.

     2. Cuando la criptorquidia constituye casi el único síntoma; entonces el diagnóstico es más difícil; sin embargo, si el origen es realmente hipofisario, hay pequeños estigmas hipopituitarios, sobre todo talla excesivamente baja, esqueleto particularmente grácil, tendencia a la adiposidad, etc. (Þ).

     B) Insuficiencia testicular. La insuficiencia testicular juvenil se acompaña casi constantemente de criptorquidia. Por lo común, hay, a la vez, adiposidad de tipo genital o síntomas de eunucoidismo, si bien éstos no se hacen nunca visibles hasta que la pubertad está muy cerca o después de ésta. Cuando hay síndrome adiposogenital, el cuadro de éste, con la criptorquidia, es casi idéntico al síndrome adiposogenital con criptorquidia de origen hipofisario que acabo de citar; y es muy importante hacer el diagnóstico diferencial de ambos —criptorquidia por hipogenitalismo o criptorquidia por hipohipofisismo—, ya que de este diagnóstico dependerá el tratamiento —testicular o hipofisario, respectivamente—. La distinción se hace teniendo en cuenta los datos ya expuestos en otra parte (Þ).

     C) Insuficiencia tiroidea. Es muy frecuente en ella la criptorquidia, incluso en los hipotiroidismos leves. Es éste un dato clásico y exacto; pero la preocupación actual por la patología hipofisaria ha hecho olvidar los numerosos casos de criptorquidia por hipotiroidismo, que, naturalmente, se benefician mucho más de la opoterapia tiroidea que de la hipofisaria y testicular.

     D) Infantilismos. Los infantilismos se acompañan, con gran frecuencia, de criptorquidia, en la que, probablemente, el factor hipofisario es muy importante.