Centrosoma y orgánulos locomotores

El centrosoma, orgánulo ausente en las células de muchos vegetales (numerosas gimnosperas y todas las angiospermas ), suele situarse en las proximidades del núcleo celular. En el caso de mayor simplificación se reduce a un pequeño corpúsculo, el centriolo, que en algunas células se presenta duplicado, recibiendo el nombre de diplosoma. Rodeándolo, puede encontrarse una zona citoplasmica diferenciada y denominada centrosfera que aparece en ocasiones circundada por una formación radial o astrosfera.

El microscopio electrónico ha permitido observar que el centriolo esta constituido por proteínas fibrosas estructuradas en 9 microtubulos, con frecuencia dobles o triples, que se disponen formando la pared discontinua de un cilindro hueco de 0,5 ? de altura y 0,15 ? de diámetro; el diplosoma esta formado por una pareja de tales estructuras con sus ejes perpendiculares. Resulta curioso comprobar que la misma estructura se halla repetida en la base de los órganos locomotores filiformes, cilios y flagelos, constituyendo los llamados corpúsculos basales o blefaroplastos; a lo largo  del cilio o flagelo continúan los 9 microtubulos, además de una pareja central que forma el eje de estos orgánulos locomotores.

El origen de los corpúsculos basales de los gametos flagelados de algunas plantas, que se ha podido comprobar que se derivan de la multiplicación de un centriolo genuino, explica la identidad estructural de estos orgánulos celulares. Desde el punto de vista funcional, tanto los centriolos como los corpúsculos basales tienen un papel de centros cinéticos (kinesis= movimiento); los primeros, que rigen el desplazamiento de los cromosomas durante la división celular mitosica; los otros, el movimiento de los orgánulos locomotores en cuya base se encuentran implantados