Paladar óseo.

Semiología del paladar óseo:

      A) Malformaciones del paladar:

     1. Paladar fisurado, acompañado o no de labio leporino y, a veces, de otras anomalías congénitas, como la micrognatia o micrognatismo (intensa retracción del maxilar inferior). Puede ocasionar dificultades insuperables a la alimentación y producir la muerte en los primeros días.

     2. Se ha dado mucha importancia como signo degenerativo al paladar ojival; la tiene menos de lo que se suponía: hay muchos individuos con paladar ojival absolutamente normales. Se presenta como anomalía congénita en distintas afecciones: en el síndrome de Marfan, en la esferocitosis hereditaria, en la neoplasia endocrina múltiple tipo II B, etc.

     3. Las malformaciones dentarias de la heredosífilis (Þ) se asocian preferentemente con el paladar ojival.

     4. El paladar plano puede observarse en individuos con vejez prematura, por reabsorción del reborde alveolar.

     B) Perforación del paladar:

     1. Se observa principalmente en casos graves de gomas sifilíticos ulcerados o de ulceraciones tuberculosas. La sintomatología es evidente, así como el diagnóstico de naturaleza. Se considera como un signo de mal pronóstico, sobre todo en la tuberculosis.

     2. Hay casos raros, de perforación del paladar, en la tabes, por úlcera perforante tabética (Þ).

     C) El llamado torus palatinus es un proceso exostósico del paladar, en forma de protuberancia alargada, a lo largo de la sutura intermaxilar o de la sutura palatomaxilar; aun cuando es un proceso congénito, se desarrolla algunas veces tan sólo hacia la adolescencia o la juventud. Puede dificultar la palabra o la masticación. Prominencias palatinas por exostosis pueden ocurrir en la osteodistrofia fibroquística del hiperparatiroidismo.