Sarcoides múltiples benignos.

Sarcoides múltiples benignos (lupoides miliar benigna) (Besnier-Boeck-Schaumann).  Se trata de nódulos de tamaño variable, desde un cañamón hasta una pieza de un duro, redondeados; generalmente, circinados, amarillentos o rosados con el centro furfuráceo, con tendencia confluente. Otras veces son más escasos, voluminosos, violáceos, con telangiectasias (sarcoide tuberoso). Se presentan, finalmente, en forma infiltrante, difusa, constituyendo el lupus pernio. Son estas lesiones especialmente numerosas en la cara, en los miembros superiores y en los hombros, pero pueden observarse en todas partes. Pueden aparecer sobre un fondo eritrodérmico o cianótico. El interés de estas lesiones —que antes se consideraban vecinas al sarcoma o al lupus, pero con curso benigno y que sólo preocupaban a los dermatólogos— está en que hoy sabemos que se trata de una reticuloendoteliosis crómica, epitelioide, la sarcoidosis, enfermedad probablemente infecciosa, de origen ignoto (¿tuberculosis?, ¿lepra?, ¿virus desconocido?) —o más bien una disreacción inmunitaria a diversos antígenos—, que puede afectar no sólo a la piel, sino a todo el organismo, dando lugar, según su localización, a los más variados síndromes: diabetes insípida, parálisis diversas, alteraciones pulmonares que simulan la tuberculosis (granulia fría) (Þ), osteosis escleroquística (Þ), hepato y esplenomegalia (algunos recuerdan a la anemia esplenomegálica): (Þ), ileítis terminal (Þ), linfadenia (Þ), elefantiasis, uveoparotiditis (síndrome de Heerfordt) (Þ), conjuntivitis (Þ), eritema nudoso unido a fiebre y artralgias (síndrome de Loefgren) (Þ), síndromes neurálgicos cambiantes (caso mío). La existencia de las lesiones cutáneas permite sospechar la naturaleza de todas estas otras lesiones que, cuando se presentan aisladas, son de interpretación muy difícil.

En muchos casos, las mismas lesiones cutáneas son atípicas, siendo precisa la biopsia para el diagnóstico (infiltración de células epitelioides y de células linfocitarias). Las células epitelioides aparecen en la punción esternal. También es, a veces, útil para el diagnóstico la radiografía de las lesiones óseas, que muestra, sobre todo en los dedos, en las últimas falanges, quistes típicos, yuxtaarticulares. Finalmente, se ha propuesto para el diagnóstico la cutirreacción (Þ); la reacción a la tuberculina suele ser, en cambio, negativa o muy débil, dato importante para la diferenciación, con el lupus tuberculoso. Los datos hematológicos son inciertos; en algunos de mis casos había intensa anemia hipercrómica. Apoyan el diagnóstico de sarcoidosis, además de la prueba cutánea de Kveim —que requiere pureza del antígeno— la elevación en plasma del enzima convertidor de la angiotensina I («ACE»), tanto más alta según la actividad y extensión del proceso.



  • lesiones oseas del sarcoide
  • lupus sarcoide
  • nodulos sarcoides
  • sarcoide humano

  • sarcoides

Comentarios:

Loading Facebook Comments ...
Deja tu comentario
Tu Comentario