piel
Arsenicismo crónico.

Ciertas afecciones endocrinas.

Impétigo.

Pústula maligna, carbunco, ántrax maligno

Pruritos locales.

Pruritos de causa nerviosa.

Pruritos tóxicos, Prurito alérgico.

En la uremia crónica.

Prurito en las enfermedades de la sangre.

Prurito senil.
