Vómitos por lesiones renales.

Vómitos por lesiones renales:

      A) Las lesiones renales, agudas o crónicas, se acompañan de vómitos, sobre todo las nefritis agudas en los niños, en los que la intensidad de los vómitos, y su acompañamiento de cefalea y, a veces, convulsiones, pueden hacer pensar en un proceso meníngeo o tumoral del cerebro; también se confunden con los vómitos cíclicos acidósicos; son, igualmente, muy intensos en el riñón poliquístico (Þ). Las pielonefritis pueden ocasionar vómitos.

     B) Hay una forma dispéptica del cáncer renal (Þ), que puede anunciarse durante largo tiempo tan sólo por trastornos digestivos, en los que predominan los vómitos.

     C) También son frecuentes en el riñón ptósico y en la hidronefrosis (Þ). Los vómitos del riñón movible pueden presentarse en crisis (Dietl); pero muchos de los accidentes que se diagnosticaban así, hace algunos años, tenemos hoy la impresión de que eran o errores de diagnóstico o vómitos nerviosos en asténicas.

     D) El comienzo por vómitos intensos en el cólico nefrítico no es raro, y algunas veces con tal intensidad, que, unido al meteorismo abdominal, hacen pensar en una obstrucción intestinal (Þ). Pero aun fuera de los accesos cólicos, puede haber una sensibilidad permanente para el vómito, que desaparece bruscamente al expulsar el cálculo, como varias veces he podido comprobar.