Reflejos de defensa

Reflejos de defensa (o de automatismo medular).  En los enfermos afectos de una lesión de la vía piramidal, el tono muscular, liberado de la inhibición cortical que normalmente se transmite por dicha vía piramidal, hace que los movimientos de defensa se ejecuten por la médula automáticamente, con intensa energía. Estos movimientos automáticos constituyen los reflejos de defensa. El más corriente consiste en que el observador, estando el enfermo echado, doble suavemente los dedos del pie del paciente sobre la planta; o excite ligeramente ésta con la punta de un alfiler, si hay lesión de la vía piramidal, el pie se dobla sobre la pierna, la pierna sobre el muslo y el muslo sobre el vientre; este encogimiento general de la pierna dura un corto tiempo, y después aquélla, lentamente, se extiende (triple retirada).

     Aparece este reflejo:

     A) En las hemiplejías, desde el momento del ictus; es bilateral y muy intenso. Después queda reducido al lado enfermo. Tiene interés para la diferenciación entre las hemiplejías orgánicas y las funcionales (Þ).

     B) En las paraplejías espasmódicas (Þ).