Desintegración Radiactiva
Una fuente de energía conocida, pero que no se había podido utilizar hasta hace pocos años, es la desintegración radiactiva.
Las partículas ionizadas emitidas son fuentes de energía aprovechables, directamente como energía eléctrica o transformándola en calor. Su principal inconveniente era que las cantidades de combustible radiactivo asequible eran tan pequeñas que la densidad de energía producida no era aprovechable por exigua.
Sin embargo, la puesta en marcha de los grandes reactores con su secuela de productos de fisión y la producción en grandes cantidades de isótopos radiactivos han hecho posible que se pueda utilizar este combustible como fuente de energía útil. Llamaremos generadores isotópicos de energía a aquellos sistemas que utilizan como fuente primaria de la desintegración radiactiva. Dependiendo de la forma como se utilice esta energía primaria, se clasifican en dos grandes grupos: baterías isotópicas, en las que se utilizan directamente la carga eléctrica y la energía cinética de las partículas radiactivas; y conversores, en los cuales el calor producido por la degradación de la energía de las partículas es aprovechado mediante sistemas conversores estáticos o dinámicos.
- LA ERA RADIACTIVA
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