Tubos faríngeos

Los tubos faríngeos están destinados al mantenimiento de la permeabilidad de las vías respiratorias impidiendo sobre todo la caída hacia atrás de la lengua.

Los tubos pueden ser introducidos por vía oral, como tubos orofaríngeos, o bien por vía nasal, como tubos nasofaríngeos.

Tubo orofaríngeo

Los tubos a emplear son esencialmente el de Guedel y el de Safar

Técnica

El tubo se introduce en la boca con la abertura faríngea dirigida hacia el paladar. En esta posición, se desliza el tubo en dirección a la cavidad faríngea y se gira 180°.

Mediante este movimiento de giro, la base de la lengua es empujada hacia delante. La situación exacta del tubo depende de la correcta elección de su tamaño.

Un tubo demasiado corto puede ocasionar que la base de la lengua se coloque entre la abertura del tubo y la laringe.

Un tubo demasiado largo puede provocar ahogamiento o irritación (náuseas)

El tubo de Safarsc diferencia del de Guedel por la existencia de  una pieza externa que permite la respiración boca a tubo sin contacto directo con la boca del enfermo.

La introducción del tubo de Safar se realiza con la misma técnica que la del tubo
de Guedel