Esclerótica.

Esclerótica

Son, en cambio, interesantes al patólogo los cambios de coloración de la esclerótica:

      A) La más frecuente es la esclerótica azul: toda la extensión de la esclerótica aparece de un tono uniformemente azulado, más o menos intenso. En general, indica calcificación deficiente, y se presenta en las siguientes circunstancias:

     1. Es un síntoma típico de la osteogénesis imperfecta (Lobstein) (Þ), u osteopsatirosis.

     2. Se presenta también en algunas endocrinopatías, como la enfermedad de Addison, la espasmofilia, el síndrome adiposogenital.

     3. Algunos niños y jóvenes, sobre todo mujeres, presentan, sin ningún otro trastorno patológico, la esclerótica azul; desapareciendo con la edad. La he visto asociarse con la geofagia (Þ) y la tartamudez.

    4. También ocurre en la enfermedad de Ehlers-Danlos.

     B) Una coloración azulada, más oscura, no uniforme, se presenta en algunos casos de la rara afección alcaptonúrica (Þ). Estas manchas oscuras suelen presentarse en el sector temporal de la esclerótica y se acompaña de ocronosis o pigmentación parda o negruzca en los cartílagos auriculares, nasales y articulares. La orina elimina ácido homogentisínico que le confiere un color pardoscuro, dejada en el vaso unas horas y puede teñir la ropa interior.

     C) Manchas azules o negruzcas, por adelgazamiento de la esclerótica en algunas zonas, debido a escleritis crónica se observa en la artritis reumatoide. Excepcionalmente aparece luego una escleromalacia perforante.

     D) En casos de sarcoma melánico, puede haber pigmentación oscura de la esclerótica de la piel y melanuria (Þ).

     E) Recordaré, por último, la coloración más conocida, la amarilla de las ictericias (Þ).